Tengo algo que decir, papá:
¿ Porqué bajas la mirada ?
¿ Porqué callas y no insultas como antes?
¿
Donde la fuerza brutal al desvalido rostro ?
¿
Y mi sangre, en que tierra cae ?
¿
Y las cirugías antañas que aún no cicatrizan... ?
Tengo
algo que decirte, padre:
¿ Qué vienes a ver, tras estos barrotes que tú me has forjado ?
¡
Anda ve a expiarte a otra parte !
Que estoy aquí,
amando la imagen que no has sido,
brillando en libertad.
Rebelde Luminar
Fuerte, muy fuerte, un abrazo
ResponderBorrarFuerte, pero no debe callar. Gracias por estar. Otro abrazote
BorrarBelleza en las letras para expresar algo tan duro, tan fuerte. Me gustó mucho felicidades y saludos!
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